La antropología es, en la edad moderna, el mejor medio para el estudio del hombre y sus orígenes, de lo que es en sí mismo y de las huellas por él dejadas a través de la cultura.
La antropología tiene dos campos de investigación: uno indaga el origen de la vida por medio de sus teorías de la evolución, las leyes de la herencia, la escala del tiempo geológico y las razas humanas, y es llamada antropología física; el otro aspecto se ocupa del hombre, de la cultura prehistórica del viejo y del nuevo mundo, de la familia, de la sociedad, de la religión, de la magia, del arte y del lenguaje, y es conocida con el nombre de antropología cultural. También encontramos una gran variedad de ramas auxiliares que sirven de complemento a las anteriores.
Estando la antropología sometida a las observaciones y alteraciones de las ciencias experimentales, ha dado origen, a través del tiempo, a diversos tipos de antropología, que muchas veces se contradicen entre sí.
Todo este largo proceso del estudio del hombre y sus orígenes es, en definitiva, el estudio del hombre según el hombre. Sus resultados siempre serán contradictorios, diversos, y nunca se podrá llegar a un resultado concreto.
Para llegar al conocimiento integral del objeto de estudio (el hombre) dependemos de un instrumento que de por sí es desconocido: el mismo hombre.
Si queremos respuestas concretas y definitivas sobre el origen de la vida, del hombre, de las razas, y sobre el sentido de la existencia, necesitamos un estudio distinto: estudiar al hombre desde la perspectiva de la conciencia, el estudio de sí mismo, y esto nos permitirá al mismo tiempo conocer el origen de la vida y del universo. El hombre es consubstancial al universo, uno está contenido en el otro.
Este axioma es y siempre será la base de la filosofía. ¿Porqué debe ser distinto para la ciencia? Con mayor razón la ciencia debería cambiar sus métodos ahora que se encuentra frente a un nuevo reto: conocer el universo de lo infinitamente pequeño, es decir, el regreso al universo interior.
La nueva antropología es el estudio del hombre a través de sí mismo, utilizando las facultades de la conciencia, que yacen adormecidas esperando el instante de ser despertadas.
Gracias a la antropología gnóstica podemos conocer los arquetipos de las distintas civilizaciones para poder llegar a la fuente original del conocimiento, común a todos los grupos étnicos, y a la relación de esta sabiduría con el hombre y con el cosmos.
Este es el objetivo específico que se propone la ASOCIACIÓN GNÓSTICA Samael Aun Weor: enseñar la didáctica y la dialéctica apropiadas para el estudio del hombre y su medio ambiente.